domingo, abril 4

Verde por fuera

Mañana se acaban las vacaciones de esta semana festiva. He intentado descansar, pero en este descanso me vinieron a la mente muchos recuerdos y necesidades que no pensaba tener porque al final de cuentas ya me queda muy poco tiempo en esta ciudad, que a pesar de su gente muy amable y sus lugares bonitos, me siento embrollado.

En Bogotá, ya se cumple mi tercer mes, me ha gustado todo, pero, no me acaba de gustar esa razón que me lleva a sentirme que aún sigo pensando en las palabras que llevan las mismas letras de recuerdo.

Pensé que sería distinto, que perdería la rutina, sin embargo, encontré una monotonía en los días que han terminado por tener una sensación distinta a la de hace unos meses cuando dejé mi casa y mis amigos.

Hablo de gustos y más gustos porque los disgustos sólo quedan dentro de los morrales que me regaló ella cuando nos despedimos.

Basta ya de poesías, canciones de amor y crónicas ahistóricas. Acaba de sonar nuevamente el celular y vuelvo a lo mismo.